Aquellos maravillosos años
El nombre de este capítulo está inspirado en una serie de los 80 que solía ver con mis hermanos, no pude pensar en un título mejor para esta época.
En este episodio de la vida de Pepe quiero evocar aquellos tiempos de la adolescencia en los que surgirían los primeros romances, bailes y actividades culturales en las que desarrollaría sus múltiples talentos, allá por los años 54-56.
Un paseo por el parque en la Feria de septiembre, una de las ocasiones que había para alternar chicos y chicas, y como no, para tener una cita.
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Aquí otra fotografía en el parque, un día de verano de 1955. ¡Me encanta su expresión! Y los vestidos de ellas.
Pepe tenía muchas inquietudes y aficiones, entre
ellas la literatura, la poesía o la música. La radio, o los recitales, permitirían dar a conocer esa faceta artística
suya. También el cine. Sí, en el cine entonces los pases eran muy largos, y
entre el nodo, los trailers, una película, y una segunda película, había varios descansos,
Pepe amenizaba esos descansos tocando el piano.
Los bailes en Cazadores eran muy esperados, escaparate para lucirse y encontrar pretendiente, o "pretendienta". Pero no estaban solos, observando estarían las madres, preocupadas más que sus hijas en que ellas encontrasen un "buen partido" para casarse.
No todo eran bailes, aquí una invitación a un ciclo de Conferencias en Cazadores, en esta ocasión, no era él quien estaba al piano, para variar. Curiosamente el día de su actuación, 19 de abril, es mi cumpleaños, y fue el día que empecé a trabajar en este artículo.
La radio
Y volviendo a la radio, en aquellos tiempos la mayoría de actividades culturales y de ocio entre los jóvenes estaban promovidas por el Frente de Juventudes y por la Asociación Femenina.
Radio Juventud fue un medio que permitió a Pepe y los amigos de su quinta, dentro del orden establecido, introducir novedades musicales, por mucho que le pesase a los más veteranos.
Y digo esto porque tengo constancia, ya que llegó a mis manos un poema que refleja esos días de radio. Aquí un recorte extraído del libro de D. Martín Martí Font "Bajo esa luz del Castillo...", Colección de versos Yeclanos. El poema se llama "Fiesta en la Emisora", y en él hace referencia a mi padre como un chico activo, terco y romántico. Nombra también a otros muchos jóvenes que formaron parte de aquella radio, y a personajes ilustres de la época, como D. José Martínez Sánchez, abogado, de quien hablaré en siguientes episodios por su influencia en la vida de Pepe.
El grupo "La Andorga" formado por Pepe, "Juanucho" y "el Velica" es recordado por los que vivieron aquella época, lástima que no haya quedado ningún documento gráfico de aquello. Sí de las canciones que entonces sonaban, y que ellos tocaban cuando había ocasión. Aquí una copia única y maltrecha de la lista de discos que tenían en la radio. En el "top", Picolissima Serenata, de Renato Carosone.
No estaba segura de si compartir estas fotografías, hoy que las sensibilidades políticas están a flor de piel. Pero no se trata de política, sino de lo que Pepe vivió, además con orgullo. Francisco Ortín Marco, el "Koki", delegado del Frente de Juventudes, eminencia en la historia de la radio y en la historia de Yecla, familia (por parte de la abuela Paca) y más que amigo de Pepe hasta el fin de sus días, le saluda.
Aquí otra fotografía con amigos, Pepe de lado, pareciera que están en un "Burguer", al estilo años 50 y en Yecla, no en USA.
Después de los romances, recitales, radio, fiestas, bailes y días de campo, llegó la hora de la verdad, el momento de dejar el pueblo para enfrentarse a un nuevo reto: la Universidad. ¡Siempre quedarían los veranos!
Gracias a todos los que me estáis ayudando a dar vida a esta historia. ¡Porque él se lo merece!
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